Tanto el agua de red como la de pozo que se consume en La Plata y en distintos puntos de la Provincia presentan inconvenientes que van desde el fuerte olor a cloro hasta la excesiva presencia de nitratos, nitritos y bacterias. Tan es así que la preocupación va indefectiblemente en aumento.
Desde la Universidad Nacional de La Plata (UNLP) ya lo han advertido con diferentes estudios. Sin ir más lejos, el Taller de Aguas (equipo de investigación integrado por docentes y estudiantes de las facultades de Exactas y Trabajo Social) comprobó la contaminación que registran los pozos del Gran La Plata.
En ese sentido, un informe -cuyos resultados se conocieron a fines del último año- demostró que el 90% estaba contaminado. Entre los elementos contaminantes del tipo bacteriano encontraron Escherichia coli y coliformes, que pueden causar diarreas y vómitos. Mientras que, sobre la presencia de nitratos y nitritos, la directora del proyecto Taller de Aguas, Leda Giannuzzi, explicó a Hoy que producen “un cuadro en el que la sangre no transporta oxígeno en forma adecuada”.
Por otro lado, Giannuzzi también investiga las algas que durante el verano están presentes en el Río de la Plata, del que se extrae el agua para su posterior potabilización. De hecho, asegura haber encontrado nitritos y nitratos en la red de agua corriente que abastece a la ciudad y que nada tiene que ver con los pozos.
Consultado por Hoy, el secretario de Relaciones Institucionales de ABSA (empresa distribuidora del servicio), Luis Manzur, dijo que la compañía no está al tanto de dichos estudios.
Antecedente
En lo que hace al Conurbano bonaerense, una de las regiones más castigadas por la contaminación, cabe subrayar que el municipio de Berazategui entró en un litigio judicial con la ex prestadora del servicio, Aguas Argentinas, por la contaminación de la costa del río y del agua potable, con desechos cloacales sin tratamiento que provenían de Capital Federal.
Tras una audiencia de conciliación, llevada adelante en septiembre de 2004, la Corte Suprema de Justicia ordenó la construcción de una planta depuradora de líquidos cloacales que debería estar lista para 2008. Pero las obras recién comenzaron este año; mientras tanto, el riesgo continuó en aumento.
En Casares
Otro caso emblemático es el de la localidad bonaerense de Carlos Casares, cuyos vecinos llevan una década implorando por agua potable apta para el consumo.
Hace unos años, los análisis realizados al agua de red arrojaron un alto contenido de arsénico (más de 200 microgramos por litro de agua) y la comuna inició gestiones, tanto ante la ex prestataria Azurix como ante la actual ABSA.
En septiembre de 2006, ABSA construyó una planta de abatimiento de arsénico. En un primer momento, la planta lograba bajar notablemente los niveles de arsénico en el agua, pero meses después el arsénico comenzó a subir.
En diálogo con Hoy, el intendente de Carlos Casares, Omar Foglia, explicó que “a los seis meses, la planta empezó a fallar y encontramos altos niveles de arsénico. Incluso, en
los últimos análisis descubrimos aluminio en niveles que se hallaban al doble de lo permitido”.
Ante esa situación, el jefe comunal y la comisión fiscalizadora denunciaron a ABSA ante el Defensor del Pueblo de la Nación y le solicitaron la entrega de bidones de agua potable a los sectores más empobrecidos de la población. Pero la compañía argumentó que no le correspondía esa responsabilidad.
En el último análisis -realizado hace menos de un mes por la Comisión de Energía Atómica- se reveló arsénico en 80 microgramos por litro de agua y aluminio en 392 microgramos por litro, cuando los valores de referencia son: el de arsénico, 10 microgramos por litro; y de aluminio, 200 microgramos por litro.
El intendente tiene previsto reunirse con el gobernador de la Provincia, Daniel Scioli, y elevar un petitorio al Gobierno nacional. “Hemos agotado todos los canales, hemos sido tolerantes, hemos tenido charlas, nos juntamos intendentes de los distritos vecinos para presionar. Esta situación ya no se soporta”, sostuvo Foglia.
El intendente afirmó que, si no hay respuesta favorable por parte de la compañía, el próximo paso será iniciarle acciones judiciales. Consultados por este medio, voceros de ABSA dijeron que en las últimas horas hubo un contacto “muy positivo entre las autoridades de la compañía y la intendencia”.
También recordaron que esa firma tiene previsto poner en actividad la celda n° 5, adquirida en Brasil, que permitirá filtrar un volumen mayor optimizando el proceso. Pero, al menos hasta ahora, el agua sigue generando una marcada preocupación.
Diario HOY en la noticia
Hola!!!!!
ResponderEliminarEl agua, que temita, nosotros en Pehuajó el agua nos va envenenando de apoco y encima la tenemos que pagar, estamos pagando nuestra propia muerte, tiene arsénico……
Feliz domingo, recorda que la cita es el miércoles, te acordas que te invite a un concurso, bueno me hacen un reportaje desde España por mi blog, necesito tu apoyo, pasa por mi blog y veras lo que tienes que hacer..éxito para vos.
Un súper-abrazo de oso.